Se fue sin pagar. La culpa la tuvo «un despiste». No hubo mala intención. Nada más lejos de la realidad. Pero hay historias sencillas que ponen en valor la honradez de la gente, a pesar de haber cometido un lapsus.
En cualquier caso, los dueños del bar Arca Gourmet de O Pedrouzo, en A Coruña, especializados en preparar desayunos para los peregrinos que hacen el Camino de Santiago, se llevaron una grata sorpresa al recibir una carta desde Benidorm que contenía una emotiva nota acompañada de un billete de 5 euros.
«El pasado martes 23 de noviembre estuve en vuestro establecimiento desayunando y por despiste me marché sin pagar. Ya lo siento. Qué vergüenza. Aquí os mando 5 euros, 3,50 del desayuno y 1,50 de propina«, decía la nota escrita por Domingo López que quiso de este modo saldar su deuda.
Acostumbrados a los «simpa»
La honesta acción conmovió a Mariano Aponte y su mujer Lourdes Céspedes, los dueños del bar, que están acostumbrados al «simpa» de los peregrinos. «Aquí desayunan, se ponen a hablar entre ellos, cogen sus mochilas y se marchan. A veces, con las prisas, alguno se va sin pagar. Esta persona se dio cuenta a mitad de etapa y quiso enmendar el error cuando llegó a casa. No es la primera vez que nos pasa algo parecido», dice Aponte en declaraciones a La Voz de Galicia.
Este matrimonio paraguayo, que tiene tres hijos y llevan cerca de 20 años viviendo en España, piensa que esta buena acción está relacionado con el karma, ya que en muchas ocasiones son ellos los que ayudan a los peregrinos que necesitan un café o un trozo de bizcocho y no pueden permitírselo.
«Por despiste me marché sin pagar. Ya lo siento. Qué vergüenza. Aquí os mando 5 euros»
«En el Camino pasan muchísimas cosas, la historia se escribe día a día y hay que seguir gastando zapatillas, porque hay muchos negocios que dependemos de esto y estamos dispuestos a recibir a la gente con una sonrisa. Con ella el día empieza de otra manera y no cuesta nada», asegura Mariano.
Fuente: El Confidencial